MARISCAL, FRANCISCO
Una mañana, el barrio residencial se despertó consternado. Tigre, elperro de doña Dolores de Anca, había desaparecido misteriosamentedurante la noche. Todos los habitantes del barrio se pusieronnerviosos. Unos, los habitantes humanos, decidieron llamar alcomisario Peláez, un policía con muy buen olfato. Y otros, loshabitantes perros, también comenzaron a investigar para resolver elmisterio. Una auténtica novela policíaca para jóvenes lectores en que, gracias a la colaboración de todos, se acaba descubriendo alculpable.