SÁNCHEZ MONGE, MANUEL
Hoy como ayer la Iglesia necesita santos y necesita también guías y maestros para recorrer los caminos de la vida espiritual. Santa Teresa quiere trasladarnos sus propias vivencias, su experiencia de Dios, que puede servir de referencia en el propio camino, siempre original, hacia la unión íntima con Dios. La Doctora mística no cuenta teorías: «De lo que no hay experiencia, mal se puede dar razón cierta», afirma en "Las Moradas". Teresa comienza con una especie de catequesis narrativa y confidencial. Con un gran afán de comunicación y un propósito no solo didáctico, sino mistagógico, trata de conducir a otros hasta donde ella misma ha llegado. Precisamente en esto consiste lo que la diferencia de otros místicos y lo que ha fundamentado el éxito de sus escritos.