VAN STRAATEN, WERENFRIED
En 1947, para socorrer a los sacerdotes expulsados de la Alemania
del Este, que corrían peligro de morir de hambre en los campos de
refugiados, el «Padre Tocino» recorrió Bélgica y Holanda distribuyendo alimentos, ropa y medicinas. Nace así la «Ayuda a la Iglesia necesitada».